El 14 de noviembre de 2025, Jimmy Butler, de 36 años, hizo su debut con los Golden State Warriors en una victoria ajustada de 109-108 sobre los San Antonio Spurs en el AT&T Center de San Antonio. Con 21 puntos, 8 rebotes y 2 robos, Butler no solo se adaptó al ritmo de la NBA, sino que también demostró por qué los Warriors lo ficharon: como el compañero de confianza que Stephen Curry necesitaba. El capitán de los Warriors, Curry, de 37 años, desató una tormenta de anotación: 49 puntos, 9 triples y 4 rebotes, en una de sus actuaciones más explosivas de la temporada. La victoria elevó el récord de Golden State a 8-6, mientras que los Spurs cayeron a 8-4, en una noche que cambió el rumbo del Oeste.
El entrenador Steve Kerr, de 59 años, ha sabido equilibrar la experiencia con la juventud. Jugadores como Will Richard, de 22, que anotó 30 puntos en su primer inicio como seleccionado en la 56.ª posición del draft de 2025, y Brandin Podziemski, de 22, que regresaría al banquillo tras la vuelta de Curry, dieron aire fresco. Mientras tanto, Al Horford, de 38, volvía con su habitual inteligencia táctica, y Kuminga, también de 22, seguía fuera por tendinitis bilateral en las rodillas —una sombra que persiste en el futuro del equipo.
El calendario se vuelve más exigente. En diciembre, los Warriors enfrentarán a los Nuggets, los Suns y los Lakers —tres de los mejores equipos del Oeste. Pero ahora tienen una ventaja: equilibrio. Curry puede descansar más minutos, Green puede centrarse en la defensa, y Butler puede ser el hombre de confianza en los últimos minutos. Eso es lo que falta en muchos equipos: un jugador que no solo anota, sino que gana partidos.
Butler aportó defensa intensa, liderazgo en momentos críticos y capacidad para cerrar partidos, algo que los Warriors perdieron tras la salida de Klay Thompson. Su presencia permitió que Stephen Curry jugara con menos presión defensiva, mejorando su eficiencia ofensiva y su promedio de triples. Además, su experiencia en playoffs es invaluable para un equipo con jugadores veteranos como Curry y Green.
La lesión de espalda de Butler generó incertidumbre, especialmente antes de partidos clave. Sin él, el equipo pierde su segundo líder en defensa y su capacidad para anotar en los últimos minutos. Sin embargo, su regreso en noviembre demostró que su resistencia y preparación física lo convierten en un jugador confiable. Su ausencia temporal no fue catastrófica, pero sí evidenció lo necesario que es su presencia en la alineación.
Jugadores como Will Richard y Brandin Podziemski, ambos de 22 años, están en proceso de adaptación. Richard anotó 30 puntos en su primer inicio, mostrando potencial ofensivo, mientras que Podziemski regresará al banquillo tras la vuelta de Curry. Su rol es crucial: deben aprender de los veteranos y aportar energía en los minutos de descanso. La clave será su desarrollo bajo la guía de Butler y Green, quienes actúan como mentores silenciosos.
Aún no son favoritos, pero sí son un equipo peligroso. Con Curry en su mejor forma, Butler como segundo líder, y una defensa más sólida gracias a Green, los Warriors pueden ser un equipo de sorpresas en playoffs. Su récord de 9-8 en noviembre y su capacidad para ganar partidos ajustados sugieren que tienen el espíritu ganador. Si mantienen la salud y la cohesión, pueden llegar lejos —aunque el Oeste está más fuerte que nunca.
Aunque no se confirmó si fue por traspaso o libre agente, la falta de detalles sugiere que fue un acuerdo silencioso, probablemente con un contrato de un año para aprovechar su experiencia sin comprometer el futuro del equipo. Los Warriors, bajo Bob Myers, han sido maestros en fichajes estratégicos que no consumen recursos de draft ni cap space. Este movimiento encaja perfectamente con su filosofía: ganar ahora, sin sacrificar el mañana.
Curry está jugando con una eficiencia similar a su temporada MVP de 2015-16: 27.9 puntos, 11.5 intentos de triples y 38.9% de acierto. Lo que cambia es su apoyo: antes tenía a Klay y Draymond como su base defensiva; ahora, Butler y Green lo complementan. Su promedio de minutos (30.8) es el más bajo en años, lo que indica que el equipo está gestionando su carga física —un signo de madurez táctica, no de declive.
1 Comentarios
Gabriel Gacitúa noviembre 23, 2025
Me encanta cómo se está armando este equipo. No es el clásico equipo de estrellas, pero tiene alma. Curry sigue siendo magia pura, pero Butler le da ese toque de bronce que faltaba. No se ve en los números, pero lo sentís en los últimos 90 segundos de un partido cerrado.
Es como si el equipo finalmente entendió que no necesitan jugar rápido para ganar. Solo necesitan ser inteligentes. Y eso, en la NBA de hoy, es raro y valioso.